V MEDIA MARATON RINCON DE LA VICTORIA

El entreno del pasado miércoles y el del viernes me dejó el cuerpo raro. Muy malas sensaciones. Siempre me ocurre antes de una carrera. El domingo me probaba de nuevo en una media. En este caso en el Rincón de la Victoria.

Y a estas que me levanto el domingo con ganas de competir. El desayuno bien pronto me termina de despejar. Preparo la mochila y me visto de luces. Un sonido que me encanta se oye por el pasillo, son los pasos de mi hijo Marcos, que viene tosiendo y que adormilado me dice “¡Papi!” y me suelta un beso y un abrazo. El gesto de cariño más verdadero que puedes recibir. Con esto no necesito más, vamos a por otra carrera a tope, ¡a por ella!.

Buen ambiente y muy buen tiempo el que tuvimos. Día de calor sin ser sofocante, y una leve brisa. Genial para correr. Buena organización y como siempre, enhorabuena a todos por la carrera. El año que viene repito de nuevo.

Mi objetivo era por supuesto no lesionarme, ver cómo se comportaba la musculatura, auscultar mi cuerpo y seguir aprendiendo de él. Y como fin último, respecto a los ritmos tenía 2 opciones: una, la de ir a por marca personal, Sergio me había dicho que si me encontrabaja bien que fuera a por ella, y la otra, hacer la carrera a ritmos de la maratón, pero ésta como opción conservadora.

Desde el principio me dije, “macho, vamos a mejorar los tiempos” (no hay nada peor que un tonto motivado). Tengo interiorizado que mi objetivo es terminar la maratón, y la motivación de ir mejorando y ver que poco a poco se consigue es un subidón y un motor que ayuda a no parar y seguir adelante y verme bien para conseguirlo.

Así, desde el principio iba por debajo de 5 minutos del km. Tenía que estar cerca de ese paso por kilómetro para mejorar. Los km iban pasando y me iba encontrando cada vez mejor, soy muy diésel, creo haberlo comentado alguna vez.

En el km 10 mi acumulado eran 49:16, a 30 segundos de la marca que había hecho 2 semanas antes en los 10k de Málaga. La cosa iba rodando. Me tomé gel en el km 7,5 y en el 15 aprox. y el cuerpo no bajó de ritmo. Y fui tomando líquido en todos los avituallamientos. Este es el entrenamiento oscuro. Hay que intentar no dejar nada a la improvisación.

A falta de 2 km, me sentí muy bien y decidí dar el resto, haciendo el km 21 el mejor de la carrera, con 4:34.

Finalmente, el tiempo ha sido de 1:43:48. Un nuevo subidón para el cuerpo y motivación para lo que queda. Os dejo el enlace con la carrera:

                                http://connect.garmin.com/modern/activity/625130323

Por delante 5 semanas de entrenos que se endurecen hasta el 23 de noviembre y quedarán 2 semanas de descarga hasta el día marcado en el calendario.

No hay que pensar, sólo seguir entrenando, y yendo al gimnasio para hacerlo más fuerte. Y también en lo psicológico con lecturas y videos, que ya os contaré en que estoy.

Muchas gracias a todos por los ánimos, y suerte para los esforzados runners que buscan con tesón y trabajo conseguir sus objetivos.

Mucha fuerza para todos, y sobre todo y ante todo:

                #dearhardwork

                #nopiensescorre

Gracias a mi hermano Miguel Ángel, mi madre y a mi sobrina Nerea por haberme dado la sorpresa de ir a la carrera. Y gracias por las fotos ya que no tenía ninguna desde que estoy en este maravilloso mundo del running.

                                      Foto entrando a meta.

                                                 Foto a mitad de carrera